Después de vivir toda mi vida dirigida por una absoluta dependencia a la comida y las dietas, vivir en base al rechazo a mi cuerpo que junto a la bulimia limitó mi vida, sumergida en una depresión sin diagnosticar, sin querer salir al mundo ni querer relacioname demasiado con nadie por creer que no era normal que había algo en mi forma de ser y de entender la vida de una manera profunda que no casaba con la manera de entender la vida que tenían las personas de mi alrededor, a la edad de 35 años la vida decidió que no podía más conmigo y me sacudió en forma de cáncer de mama avanzado que hizo que perdiera el pecho. 

La verdad que mirando hacia atrás, veo esta andadura de estos últimos 10 años de aprendizaje tan increíble y maravillosa que no tengo palabras suficientes de gratitud con las que expresar semejante sensación de paz, libertad coherencia y conexión conmigo misma y con el mundo. Indescriptible, la verdad.

El camino hasta mis 35 fue tan largo, tan duro, tan doloroso, tan solitario, tan abrumador, tan frustrante, tan triste… y de repente, ese mismo camino a partir de los 35 hasta ahora ha sido tan inspirador, tan revelador, tan interesante, tan precioso, tan divertido, tan curioso y tan todo bueno, que a veces me parece imposible haber podido pasar de vivir con la sensación de estar muriendo bajo tierra a empezar a vivir respirando por fin aire de libertad, paz y amor hacia mi misma.

Y en estos últimos 10 años es donde empieza a nacer “Cuéntate Verdad”. En lo que se entiende que para cualquier persona significa lo peor, para mi fue un catalizador  que hizo que empezara a conocer a un tipo de personas que para mí sorpresa entendían mi mundo y la vida como yo la entendía y hablaban de cosas que me hacían entender lo valioso y bonito había en mí y me inspiraban a trabajar en mi, a conocerme bien, a identificar mis heridas, a honrarlas en vez de odiarlas a exteriorizarlas sin vergüenza, a transitarlas y a sanarlas y una vez en ese punto a no volver a dejar que fueran una excusa para controlar mi vida.

He podido pasar de ser una persona persona que no se entendía, que no se valoraba, que le daba miedo mostrarse como era a ser una persona que se siente en paz  consigo misma, en coherencia, en conexión, que se siente libre, feliz y en profundo agradecimiento y gratitud eterna.

Cuéntate Verdad es el camino que yo he tenido que recorrer para sentirme en paz con todo lo que soy y con todo lo que me rodea. Y ese camino en mi caso empezó por poner verdad y orden con respecto a mi adicción con la comida, por poner verdad y orden con respecto a mi cuerpo y mi relación con él y por poner verdad y orden con respecto a mi discurso interno, mis pensamientos y en definitiva con respecto a mi misma y mi forma de ser. 

Por eso para mi, uno de los primeros y más importantes conceptos por el que hay que empezar es el de tomar la responsabilidad de un@ mism@ y de tu propia vida. Se trata de empezar desde cero a re-conectarte y empezar a identificar qué es lo que te está bloqueando para que puedas empezar a sentirte en paz con todo.